miércoles, 27 de julio de 2011

¡Faltan 15 días!

¡Qué poquito queda ya para que lleguen los peregrinos! los preparativos prosiguen y nuevas noticias nos llegan desde Siria y Venezuela.

En esta ocasión han sido nuestros hermanos sirios quienes se han puesto en contacto con nosotros para contarnos que, aunque viven en un país de mayoría musulmana, ellos tienen costumbres completamente occidentales a la hora, por ejemplo, de saludarse. También nos ha aclarado que ellos, al ser cristianos, no tienen ningún problema en comer cerdo, es más, ya allí lo comen, por lo que podemos darles todo el jamón serrano que queramos.
El Padre Joseph también nos ha escrito sobre su forma de celebrar la Eucaristía, y esto es lo que nos ha dicho:

Estamos muy contentos por vuestra organización.

Nosotros celebramos en rito armenio, pero como vosotros con la hostia. Llevaremos nuestro ornamentos y libros litúrgicos (buscaré la traducción de alguna oración de nuestra misa armenia) porque debemos celebrar para nuestros jóvenes algún día, cuando sea posible. Somos dos sacerdotes de rito armenio, uno de rito bizantino y un diácono de rito maronita. Entre nuestros jóvenes hay también chicos de las iglesias ortodoxas pero participan con nosotros de todo sin dificultad. Esto es algo precioso en Siria, y sobre todo en Alepo. Ahora nuestro grupo es un grupo ecuménico.

Con mucho gusto podemos participar en la misa del 13 con lecturas en árabe y armenio, como si también queréis con algún cántico religioso.

En este mismo correo, el Padre Joseph nos ha informado de su llegada: ellos saldrán de Siria el día 3 porque pasarán antes por Lourdes (tienen que aprovechar que les dejan salir del país) y visitarán tambíen Córdoba y Sevilla, desde donde saldrán en la mañana del día 12 hacia Toledo, por lo que esperan llegar el 12 por la tarde.

Pero, por si no estabamos ya suficientemente encariñados con nuestros peregrinos (de uno y otro lado), los sirios han dado muestras de lo que es espíritu cristiano y le traen a Don Braulio una cruz armenia de plata como muestra de agradecimiento por la acogida que se les está preparando.
Sin duda, el Señor nos ha bendecido, y mucho, al ponernos en contacto con nuestros hermanos de Siria y Venezuela y darnos la oportunidad de vivir con ellos estos Días en las Diócesis.

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